viernes, 30 de enero de 2015

Asphalt Ballet: Asphalt Ballet (1991)

Recuerdo que la primera vez que escuche a esta banda fue en el Marquee de L´Hospitalet (que poco nos duró) y es que el video de "Soul Survive" era una buena presentación. Conseguí que me grabaran el disco en una cassette y quizás dos o tres años después, cuando unas cuantas tiendas de discos de Barcelona echaban la persiana o simplemente se deshacían de sus vinilos, en una de esas tardes en que los colegas nos dedicábamos a recorrer esas tiendas, había una pequeña entrando en el "carrer del Carme", cuyo no recuerdo, con dos pisos en el de arriba finiquitaban todos los discos a precios irrisorios, ese día no tuve suerte y un amigo se me adelantó llevándose el vinilo de Asphalt Ballet por el módico precio de 100 pesetas de la época, me alegre por el pero no pude dejar de sentir cochina envidia (que lo sepas si lees esto, por que se que de esporádicamente te pasas por el blog). Batallitas al margen, a día de hoy me sigue pareciendo un gran disco de Hard rock, con esos toques de blues y southern rock. La había se había formado en 1988 y tras tres años de conciertos y ensayos consiguieron editar este álbum el 17 de septiembre de 1991, justo una semana antes que el Nevermind de Nirvana lo que desde luego no ayudo en un tiempo de cambio de gustos musicales. Tampoco es que su casa de discos se volcase en promocionarlos, y la prensa de la época tampoco se estiró de hecho sólo les recuerdo una entrevista para RIP.


Que proporcionaba al menos algo de información de la banda, su nombre provenía de la descripción de un policía sobre un accidente de moto, algunos detalles de la vida de los músicos como que el cantante Gary Jeffrey tenía una granja en Louisiana, que en su set list solían tocar el L.A. Woman de The Doors o que ya tenían compuestos al menos media docena de temas que me imagino acabaron (remozados con un noto más grunge en Pigs).
No sé si como homenaje al origen del nombre de la banda o simplemente por que es un arranque fuerte el disco se iniciaba con el ruido del derrape de una moto y un grito a plena potencia de Gary Jeffrey, "Hell´s Kitchen" una pieza de hard rock musculoso que perfectamente podría haber sido single. Las revoluciones no bajan con "Soul Survive" otro tema hard rockero con buenos riffs y un coro eficaz, incluso se permiten hacer un pequeño puente más melódico y acústico en medio de la canción antes de volver a rematarla con plena energía, este tema si que fue lanzado como single con incluso un video clip, producido por Samuel Bayer el mismo que hizo "Smells Like  teen spirit", con pocos días de diferencia.

"Tuesday rain" es un bonito tema que en su primera parte suena muy contenido arropado por un ritmo suave y esos coros un tanto "celestiales", y que solo se desata en el solo de guitarra superado el ecuador de la canción. Este tema también tuvo su correspondiente video clip.





"Unlucky mister Lucky", el cuarto tema el sonido se endurece de nuevo, un tema que se inicia a golpe de bombo y armónica para pasar a la voz, un riff de guitarra  afilado y donde lo que más destacada es la voz de Gary Jeffrey. "End of my rope", otro tema hard rockero de calidad y clase con sección de vientos enriqueciendo el sonido. "Heaven winds blow" es el tema donde más les noto la influencia Lynyrd Skynyrd, preciosa canción con toda esa combinación de acústicas y electricidad, y un estribillo matador y ese aire a la América más profunda que recorre toda la canción. "Blood on the highway" de nuevo la banda vuelve a la vena más hard rockera con otro tema bien construido. "Godbye yesterday" canción construida en base a una gran melodía y su magnifico coro apoyado por una voz femenina en tono gospel. "Wasted time" ese bonito tema pausado, de nuevo con esos suaves coros gospel, co escrito por el guitarra de la banda Danny Clarke junto a su amigo el por entonces archiconocido Wes Arkeen (al que algunos llamaban el sexto gunner) y que para su siguiente álbum les cedería un tema llamado "Crash diet" compuesto a medias con el amigo Axl. Entramos en el tramo final del disco a faltas de cuatro temas, los tres siguientes "Taking a walk",  "Hangman swing" y "Blue movie" tienen una característica en común y es que en toda ellas la sección de vientos está presente, hasta suena en la última de estas una trompeta, de estos tres la mejor canción es "Hangman swing" con esa armónica que le da un feeling especial a la canción. Siendo además esta y "Blue movie" los dos temas donde la vena bluesera de la banda se hace más presente. Cerrando el disco el tema más corto del disco "Do it all over again" un tema 100% acústico en una vena quizás más Dog´s d´amour. Gran disco que mereció mejor suerte.

Tras el escaso éxito del disco la banda se vió presionada por Virgin para que diesen un giro hacía la música que triunfaba en esos días el grunge, como reconoce aún dolido Gary Jeffreys en una entrevista, la banda se plego a ello, pero el decidió abandonar el barco a partir de ese momento se involucraria en diversos proyectos y bandas en una onda mucho más Lynyrd Skynyrd siendo quizás la más destacada "Alligator Stew" en los últimos años ha creado la Gary Jeffreys band también en una onda muy sureña donde incluso recrea temas de Asphalt Ballet como "Blood on the highway" pero de forma algo más calmada, con una voz aún un pelín más aspera.

martes, 27 de enero de 2015

Tokio Tapes

He aquí uno de esos grandes discos "doble y en directo" de los años 70, un disco que marco un antes y después en la banda alemana, con la salida de Uli Jon Roth y la entrada de un joven Matthias Jabs con el que cambiaría para siempre el sonido de la banda.
Pero mientras otros directos grabados en la misma década y también en el país del sol naciente llevan ya si no me equivoco hasta cuatro reediciones "made in Japan" para más señas, el querido Tokio Tapes ha sido maltratado por la industria discográfica, el doble vinilo está muy bien, pero que decir que la edición internacional en CD del 2001 es vergonzosa, se atreven a quitar un tema "Polar nights" con el objetivo de ahorrarse un trozo de policarbonato y lo que debería ser un doble CD se queda en uno simple (sin palabras),  no sirve que esa canción la hayan transplantado como bonus extra en el CD reeditado de "Taken by force". Claro que siempre hay una excepción y en Japón si lanzaron el CD en una edición doble como debe ser. Pero en este tiempo que vivimos con las discográficas lanzando ediciones de Luxe, me extraña que no hayan lanzado la correspondiente a este mítico álbum y más teniendo en cuenta que faltan tres temas que fueron interpretados en directo y que no han visto la luz si no es a través de ediciones piratas las llamadas "Nagoya Tapes".
De los tres temas "inéditos" el más prescindible sería ese poco más de minuto y medio del himno japonés interpretado con la guitarra, pero sería bonito poder disfrutar de lo que realmente sonó en aquellos tres conciertos, ya sabemos que Scorpions siempre han tenido un set list por gira prácticamente idéntico con lo cual sería fácil rescatar esos tres temas. Aunque el concierto del día 24 (en teoría no se grabó) los conciertos de los días 25 y 27 de abril, sí. Y allí también sonaron esos dos temas del "Virgin Killer" que quedaron fuera: "Cacth you train" y esa "Hell cat" de apenas tres minutos en estudio y que aquí cerraba el concierto extendiéndose más allá de ocho minutos para lucimiento de los guitarras especialmente un Roth desatado.
En cuanto al disco en sí, a estas alturas poco se puede decir que no se haya comentado ya, para mí uno de los tres mejores dobles de los setenta con un Klaus Meine en un estado vocal perfecto, y el resto de la banda no le va a la zaga en especial Roth que además de compartir vida con la última novia en vida de Jimi Hendrix, parecía imbuido en su espíritu, baste como muestra ese tema compuesto a medias por él y su novia Mónica Dannemann que es "We´ll burn the sky", esa intro a base de arpegios, y ese ritmo pausado que se irá endureciendo progresivamente.  Si las versiones de estudio eran buenas aquí simplemente las superan, impresionante la dosis de energía extra que tiene por ejemplo "Robot man" o incluso esas covers de viejos temas de rocanroll de los años 50´s. Imprescindible.
 
 
 

sábado, 24 de enero de 2015

Gillian Flynn: La llamada del Kill Club

Segundo libro de la autora de moda, espero que ahora nadie diga que escribe "libros para pijas, cincuentonas o marujas" porque queda claro tras leer este "The dark places" en inglés, que no, dudo que por el lenguaje, y el tema tratado estos segmentos de la población sean los que han encumbrado a la autora.  La escritora está claro (de momento) tiene unas señas de identidad propias protagonistas femeninas, que no tienen que caer precisamente bien, protagonistas masculinos mucho más débiles, infancias terribles y adolescencias difíciles que siguen marcando lo que debería ser la etapa adulta de sus protagonistas y esos lugares de la América profunda que tan bien retrata, en este caso nos lleva a mediados de los años ochenta, en lo que podría ser esa América de granjeros en crisis de John Cougar Mellencamp.
La sinopsis: "Libby Day tenía sietea ños la noche del 2 de enero de 1985, cuando su madre y sus hermanas fueron brutalmente asesinadas en la granja familiar en Kinnakee, Kansas. Mientras su familia agonizaba, Libby huyó y se escondió en el bosque; las temperaturas bajo cero le hicieron perder varios dedos, pero sobrevivió... para poder testificar en contra de su hermano mayor, Ben de quince años, señalándolo como el autor de la matanza. Después de todo si escuchas la música del diablo Slayer, AC/DC y similares y afirmas participar en rituales satánicos, no tienes coartada, tienes números para ser el sospechoso número uno, si a esto añadimos el testimonio de tu propia hermana la cosa se pone mal. Veinticinco años después, mientras su hermano Ben se pudre en la cárcel, la pequeña de estatura Libby Day (148 centímetros), pero ya entrada en la treintena Libby Day tiene un problema se le acaba el dinero que las buenas personas de América habían donado después de la tragedia, y ella es una vaga que nunca ha hecho nada productivo en su vida y cuya única virtud es la autocompasión.
La solución a su problema llega a través de una carta de una asociación  llamada el Kill Club, una sociedad secreta de frikis de los crímenes, cuanto más macabros y menos esclarecidos mejor... y ninguno les fascina más que la trágica muerte de las Day. Le pagarán honorarios más que suficientes para sobrevivir una buena temporada si Libby les cuenta todo lo que recuerde de esa fatídica noche...
Libby hará cualquier cosa por evitar ese infierno que supone trabajar, aunque ello investigar lo que sucedió realmente... y darse cuenta que su testimonio incriminando a Ben no fue tan sólido como ella lo recordaba. Todo apunta a que Ben no fue realmente el culpable, como los miembros del Kill Club aseguran... lo cual implica que el asesino del que Libby logró huir veinticinco años atrás sigue ahí fuera".
El libro lo reconozco me ha enganchado y ha sido lo suficientemente adictivo como para leérmelo en una semana y me ha gustado incluso más que el anterior "Heridas abiertas". Cierto es que cuesta conectar con el personaje protagonista esa cleptómana incurable llamada Libby Day y que en ocasiones parece un despojo humano, pero poco a poco, el personaje va evolucionando y amén de sus motivaciones puramente económicas subyace un creciente deseo de conocer la verdad de lo sucedido en la granja aquella noche, para ello seguiremos dos historias paralelas, una investigación en la actualidad y contada por Libby, y la propia historia de lo que sucedió en los días previos y la noche de autos a través del testimonio del hermano mayor Ben y de Patty la madre de ambos. Si lo analizó muy a fondo me parece una tragedía griega, trasplantado a la edad moderna y a la novela negra donde la casualidad también tiene su papel, pero donde nadie saldrá indemne, pero el estilo de la autora te atrapa ya sea con personajes despreciables como Runner el padre "ausente", ese "friqui" Lyle que arrastra su propio trauma y se identifica en cierta forma con la protagonista, o una vez acabada la novela con "la grandeza" y deseperación de Patti la madre. De todas maneras lo mejor es dejarse sorprender por la lectura. Este mismo año tendremos la traslación a la pantalla grande con Charlize Theron y Chlöe Grace Morentz como protagonistas femeninas.
 

martes, 20 de enero de 2015

We Are Harlot: Dancing On Nails

Y sigamos con la saga Silvertide, si ayer le tocaba el turno al bueno de Nick Perri y su enésimo proyecto, hoy se acaba de estrenar el video clip de We are Harlot donde milita como su compañero en Silvertide el bajista Brian Weaver. El próximo mes de marzo se publica el primer álbum de esta nueva banda donde está como vocalista, el cantante o ex cantante de ese grupo tan plomizo que respondía al nombre de Asking Alexandria, al menos desde que ha dejado el alcohol y las drogas su vocalista además de pillar unos kilos, algo canta. Junto a ellos Jeff George el guitarra o ex guitarra de Sebastian Bach y el desconocido y tatuado batería Bruno Agra. Pasen y vean:

lunes, 19 de enero de 2015

Nick Perri Group - It Ain't Easy

Ha estas alturas uno ya no sabe muy bien que pensar de aquellas jóvenes promesas que respondían al nombre de Silvertide, creados en el año 2001 en los últimos catorce años nos han premiado con un EP (2002), y luego un LP (2004) con los temas del EP y unos cuantos más. A parte alguna canción suelta que apareció en la banda sonora de "La joven del agua" de ese director que fue de lo más a la nada llamado Night Shyamalan. Silencio, proyectos varios, cuando el guitarra Nick Perri y el vocalista Walt Lafty crearon Sinai, se podía intuir que la banda podía volver y así fue en el 2013 unos cuantos conciertos y la promesa de un disco para el 2014, pero el 2014 se acabo y sólo ha visto la luz un single "Try, try, try" algo del todo insuficiente. Y ahora en pleno 2015 pues tenemos al hacha principal de la banda emulando a Jimmy Page, escuchese esa intro tan bluesera de dos minutos del tema en cuestión y lo que sigue y si a alguien no le recuerda a los Zeppelin, seré yo el equivocado, en todo caso seguiremos esperando a que esta pandilla de vagos algún día sean capaces de grabar la continuación de "Show & tell"  de lo contrario tendremos que conformarnos como otra "emulación" de ya saben quien.

viernes, 16 de enero de 2015

Heridas abiertas (Gillian Flynn)

Después de ver la película  "Perdida" tenía la suficiente curiosidad como para leer algo de la escritora Gillian Flynn que escribió el libro adaptado a la gran pantalla. Así que bienvenidos al particular mundo de Gillian Flynn, que tiene una bibliografía escasa tres libros, pero que ya se ha hecho un nombre dentro de la novela negra y con razón. Así que descartando por el momento el libro que dio pie a la cinta de David Fincher, me decidí por su primera obra que en inglés lleva un título que diría más gráfico "Sharp objects" aunque la traducción española que tampoco es que sea mala jugando con un doble sentido que aquí se puede aplicar perfectamente a poco que leas la novela. ¿Y qué cuenta el libro? La sinopsis podría ser la de una de tantas novelas de la serie negra: "Han pasado seis meses desde que Camille Preaker dejó su estancia en un hospital psiquiátrico y las cosas parecen marchar de manera más o menos estable. Hasta que su jefe y amigo Curry, le pide que vuelva a su pueblo natal Wind Gap (Missouri) y haga un reportaje con respecto a la desaparición de una niña y el asesinato de otra hace sólo nueve meses. Todo apunta a que se trata de un asesino en serie, y necesitan la exclusiva para su pequeño diario de Chicago. No es sólo la presión de agradar a su jefe, sino que también el reencuentro con su fría madre y con un pueblo con el cual ella no quiere volver a tener nada que ver".
Por supuesto, existe la investigación en la novela y no es ajena a algunos digamos tópicos como esa policía local bastante incompetente, el agente especial mandado desde Kansas City (por supuesto acabará fornicando con la prota) ese típico deseo por parte de los vecinos de que el asesino sea de afuera, presuntos culpables e inocentes, algún testigo poco creíble. Pero más allá de este todo deja de ser convencional y nos podemos sumergir como pocas veces en un un thriller de ambiente enfermizo.
Sí en "Gone girl" los protagonistas tenían aristas en especial el personaje femenino, aquí sucede lo mismo, a la escritora le gustan los personajes femeninos y los desarrolla con maestría, mientras los personajes masculinos son mucho más secundarios. Que nadie espere de Camille que sea la típica "heroina" que se mete a fondo en el caso para resolverlo, a medida que avanza la novela escrita en primera persona vamos conociendo más y más sobre su personalidad y no ha dejado de sorprenderme, no es sólo esa infelicidad bastante comprensible en base a lo vivido, sino la incapacidad manifiesta para superar sus traumas, el hecho que desde los trece años se halla ido infligiendo cortes con objetos punzantes por todo el cuerpo tatuándose palabras ya nos deja claro cierta fragilidad mental que con ese  "Retorno al pasado" (que diría Jacques Tourneur) a esa América profunda del medio oeste va a ser todo menos la terapia que necesita. Porque Camille principalmente tendrá que enfrentarse no sólo a la hostilidad de una parte de los vecinos de Wind Gap, sino sobre todo a sus demonios personales una madre que nunca la quiso, a los recuerdos nunca superados de una difunta hermana, reencontrarse de nuevo con toda la gente que había conocido en su adolescencia y que creía haber dejado atrás para siempre y a un nuevo reto esa hermanastra de trece años con cara de ángel y actitud de demonio.
A lo largo de sus trescientas páginas cada vez te vas adentrando más en el sufrimiento psicológico de la protagonista, en ese drama familiar del que es imposible escapar, de ese ambiente opresivo y malsano, tanto en la mansión de suelos de marfil como en la propia ciudad provincias se puede volver cada vez más opresiva y claustrofóbica, llevando a la protagonista a una espiral de alcohol continuada, salpicada con sexo esporádico ya sea con ropa cuando se trata de la ley  o sin ella cuando se trata de un sospechoso, a mentir con descaro o incluso a una insensata noche de drogas en compañía de la hermanastra adolescente para hacer aún más confuso ese universo de sentimientos donde constantemente vive sumergida la protagonista. Personalmente me costó un poco entrar en la novela hasta la página ochenta o así pero a partir de ahí todo fue in crescendo, el único pero es quizás ese digamos "segundo final" o "giro inesperado" creo que con el "primer final" cuando todos suponemos ya tenemos "al asesino o asesina" de las niñas habría sido perfecto y la novela hubiera quedado más redonda e igual de cruda, porque si algo no falta es crudeza y sordidez a destajo.
 Sea como fuera ya estoy con su segunda novela "La llamada del Kill club".

martes, 13 de enero de 2015

Kix: "Wheels In Motion" (video clip)

Decía Miguel Rios que los viejos rockeros nunca mueren, en el caso de Kix es verdad Steve Whiteman pese a que en ocasiones se vista un tanto hortera estilo Mick Jagger, sigue siendo uno de los grandes front man del hard rock, su disco del año pasado es simplemente muy bueno y en el 2015 pues estrenan video clip, que seguramente no saldrá en la MTV, pero,  ¿para qué coño esta Youtube?
 

viernes, 9 de enero de 2015

Shanghai´d Guts: Out of tune (1991)

Volvamos con otra de esas bandas perdidas en el tiempo y el espacio, de esas que desde luego no pierdas el tiempo buscándolas en el Spotify, hijos bastardos sobre todo de Quireboys y Dogs d´amour, con influencias de los Hanoi Rocks y los Rolling Stones, estos tipos no se comieron un rosco, puede que su música no fuera original, lo que no era en todo caso, es mala. Y aún a día de hoy es un disco que son sus limitaciones vocales es disfrutable, supongo que el hecho de que fuesen alemanes tampoco les ayudo en demasía de hecho su segundo y último disco "Life ain´t  nothing but a joke", tardo cuatro años en llegar y aún tuvo menor repercusión si esto es posible que el que nos ocupa hoy.
Por otro lado aunque tampoco hay demasiada información por la red, es fácil suponer que la banda se formó en las postrimerias de los años ochenta.
De hecho su primera huella sonora de hecho es un EP del año 1990 "With love from St Pauli" con un imagen típica de banda de aquellos años, aunque aquí en formato cuarteto y donde ya aparecían algunos de los temas que aparecerían en este "Out of tune" caso de "Little Suzie", "Last drink" o "Shanghai´d guts" aunque hay otras tres canciones que se quedaron fuera del disco del año siguiente "Wake up", "Long way home" y "Pay for another drink".
Y yendo ya al disco que nos ocupa, se abre con la canción que da título al grupo y ya dejan claras sus credenciales, un típico riff de rock & roll, cortesía del Axel Kraft el hermano del cantante de la banda Stefan Kraft, ese sonido alegre de piano y unos coros festivos que beben directamente de las bandas inglesas arriba mencionadas.


La segunda canción "Nights on the town" hace de nuevo una entrada a ritmo de guitarra y en esta ocasión un órgano Hammond omnipresente, el contrapunto a la vacilona forma de cantar de Stephan lo ponen en esta ocasión unos coros femeninos con un cierto aire eclesial  con chasqueo de dedos incluido con esa parte final donde predomina lo vocal sobre lo instrumental. El tercer tema es "Bang Boomerang" un medio tiempo con cierto aires funkies en la base rítmica, pero no en la guitarra, lo peor es que el tema acaba con un penoso "fade out". "Last drink" es la primera balada que suena y no me cuesta imaginarme al amigo Tyla cantando esta canción, bonito  trabajo con las melodias en la guitarras, suaves notas de Hammond.




Con "Little Suzie" volvemos a un rock más seco, sin olvidar los aires festivos y un estribillo sencillo, el típico rock & roll de toda la vida para mover los pies. "Hearts turned to stone" es la canción que más rompe los esquemas del álbum, riffs de guitarra pesados sobre una base rítmica suave y de aires orientales, que en ocasiones se rompen con la aparición de guitarras acústicas  y una forma de cantar muy contenida, probablemente el tema  más original que crearon estos chicos de Hamburgo. "Can´t light my fire" fue el primer y uno single que la banda editaría en su carrera otro tema de puro y simple rock & roll directo, sin embargo considero que le faltaba algo de chispa para ser un single. "How long will the good times roll" es otro medio tiempo bastante simplón con gotitas de glam y con buenos coros. "Fix the hole" continua la onda del medio tiempo y aunque la instrumentación es agradable con una menor duración no hubiera pasado nada. "I Really like girls" es el tema más acelerado del álbum de hecho está grabado en vivo en algún concierto en Berlín y lo calificaría como una especie de tributo al rock and roll años 50´s. "Saint Pauli girl" se impregna totalmente del espíritu de los Rolling Stones en el fondo y en las formas dejando claras algunas limitaciones de la banda y es que Mick Jagger sólo hay uno. "Memories" es la segunda balada del disco de nuevo en una onda muy Tyla, pero con una mayor crudeza e intensidad que la anterior con un solo de órgano Hammond que se ve cortado de manera abrupta por la voz y guitarras acústicas antesala de una parte final de la canción más guitarrera. Cerrando el disco está la canción que da título al disco "Out of tune" el tema más corto del en duración, un corte eminentmente de aire festivo que suena como una outtake de estudio con esas voces iniciales y finales, ese one, two, three con guitarras acústicas y alguna slide guitar, un cierre desenfadado para otra banda sin suerte.


miércoles, 7 de enero de 2015

Goodbye and welcome


Aunque los Reyes llegaron con un día de retraso, cosas de la era moderna y de las compras por Internet arribaron a buen puerto, y como en el fondo uno es un niño, está que no cabe en sí de gozo ante el nuevo juguetito. La verdad es que ya era hora de empezar a decirle adiós a la vieja cadena de música Aiwa y a aquel primer reproductor de CD´s Pionner comprado en la extinta "Don Audio" (últimamente fallabas de vez en cuando, nada demasiado serio) pero iba siendo la hora de un dorado retiro donde no serás usado a diario sino acaso un par o tres semanas al año. Aún recuerdo las ganas locas que tenía de comprarme lo para hacer sonar aquel primer CD que me había comprado y no tenía donde reproducir, que jodidamente bueno era y es este álbum de los bostonianos, para mi su obra cumbre.


Pump inauguró mi primer reproductor de Cd´s y ahora repite como homenaje en el nuevo Denon.

Fotos para el recuerdo:


domingo, 4 de enero de 2015

Slow Season: Mountains (2014)

Y siguiendo con la hornada de bandas que beben directamente de Led Zeppelin hoy nos toca enfrentarnos a la segunda obra de los californianos Slow Season (por cierto su primera obra del 2012 se puede descargar gratuitamente desde su página web).
En esta segunda entrega ellos siguen a lo suyo es decir facturando lo que llaman un Psycodelic classic rock, y no sere yo quien les desmienta aunque si en su primer disco la influencia Led Zeppelin era patente en este todavía lo es más.
Si hay una canción que sirve de muestra de lo que pueden llegar a ofrecer los Slow Season esa es sin duda "Sixty- Eight" el tema que abre el álbum donde sin ningún pudor roban el riff que abría el disco de Led Zeppelin en 1968 y entorno a este crean una canción nueva que deja ya a las claras que tanto la guitarra, como la portentosa sección rítmica han mamado mucho de la gran banda.


Pero que nadie se lleve a engaño el disco sonará en muchos momentos a los Zeppelin "Endless mountain", "Shake" o "The Defector" son dos ejemplos de lo más obvio. Pero las influencias del grupo son muy dispares y toques a Black Sabbath, The Doors, Rolling Stones,Jimy Hendrix o The Cream sonaran también a través de los surcos del CD. El grupo a pesar de sus influencias impone un cierto toque personal que hace que no caigan en una absurda copia, cierto es que bueno sería que en próximas obras se produzca una evolución estilo "Rival sons" aquí hay madera para una gran banda.
Desde los pasajes atmosféricos de "Synamon", a la huella vocal de Black Sabbath en "Damos days", ese toque más stoniano en "Ain´t gonna listen" no sólo por el piano sino también por esos coros melódicos robados de "Sympathy for the devil". La  desnudez de "Wasted years". O ese influjo a The Doors que rezuma "Apparition" que pese a un comienzo en una linea folk, enseguida deriva hacia territorios psicodélicos impregnados de guitarras acústica. En definitiva otra perla de finales del 2014 que añadir a lo mucho y bueno publicado el año pasado.