Pero de todas formas parece que Andrew Stockdale es un tipo difícil de aguantar o no se explica que los músicos que lo acompañan solo le aguanten un disco, cuando se nos había prometido un tercer álbum de Wolfmother del que ya había anticipos desde hace un par de años, comenzaron las deserciones en el seno de la banda, al final tenemos nuevo disco que podemos considerar el tercero de la banda aunque a partir de ahora quizás el nombre que debamos utilitzar no sea otro que el de Andrew Stockdale.
Aunque hace sólo una semana que escucho el disco podríamos decir que es bastante continuista con los dos anteriores en su primera parte y muy diferente a todo lo anterior a partir del octavo tema, aunque hay algunas novedades en cuanto al sonido, creo que en cuanto a nivel se encuentra bastante por debajo de sus dos predecesores, o es que quizás en lugar de meter 16 temas, Andrew podia haber seleccionado 12 o 13 temas. No creo que sea un disco que le haga ganar muchos nuevos fans, de nuevo hay mucho aroma a rock setentero, psicodelía y " préstamos" a algunes de las grandes bandas de la historia del Rock, sin ir más lejos el tema que abre el fuego "Long way to go", cuyo vídeo clip nos deja claro que Andrew tiene cada vez más aspecto de tipo un tanto ído, emula sin ningún rubor el solo inicial de "Can you hear me knocking" de sus satánicas majestades.
"Keep moving" el segundo tema puede recordar en su inicio al "Are You gonna go my way" de Lenny Kravitz, en cuanto a las guitarras me refiero, es un tema corto con un ritmo un tanto sincopado merced a la batería y que también supera la prueba. "Vicarius" es un tema sencillo pero que me encanta ese juego entre la particular voz de Andrew y la guitarra que parece responder a sus estrofas. Temas como "Year of the dragon", "Meridian", "Ghetto", "Somebody´s callig" o "Let it go" podrían encajar perfectamente en los dos anteriores discos de la banda aunque aquí juega en su contra que las canciones parecen autoplagiarse y se pierde parte de la magía. La gran novedad es quizás "Suitcase (One more time)" un tema que se aleja completamente de todo lo ofrecido anteriormente por este hombre una canción plagada de guitarras acústicas, con aires folkies y acariciando el pop, toda una sorpresa que puede que disguste a más de uno. Además supone un cierto punto de inflexión en el disco que se vuelve menos monolítico y se abre a nuevas sonoridades, aunque no siempre para bien. Con "Earth" llega un tema donde el bajo tiene un protagonismo esencial, al que habría que sumarle unos coros creados probablemente para que el público los coree en directo, sin embargo aquí está uno de los mejores solos de guitarra del álbum, con un final de canción completamente paranoico y un sonido de órgano que se va extinguiendo. Los puntos flojos del disco a mi entender son temas como "Let somebody Love you" un tema demasiado lineal en mi opinión y que aporta más bien poco o "Country" es una especie de medio tiempo con una armónica como protagonista destacada que tampoco añade mucho al disco. "She´s a Motorhead" es otro tema bastante novedoso parece una canción funky abrasiva con unas harmónicas y unas voces sintetizadas en ocasiones que le otorgan su punto de originalidad aunque parece más un divertimento que otra cosa. "Standind on the corner " es otro tema desenfadado que bebe en parte del blues y en el que destacan esos momentos de calma donde reinan las percusiones. "Black swan" con sus silbidos y sonido de tambores nos llena de nuevo de aires hippies, recordándome ligeramente algun sonido de los Beatles. "Everyday drone" cierra el disco de nuevo con aires mucho más pop que rock, y es que la segunda parte del disco se vuelve bastante menos agresiva que la primera y sobran algunos temas resintiéndose el conjunto.
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